Uno no se encuentra sumido en los confines de su inconsciente por elección propia, mientras duerme, una gran parte de la vida trascurre y encuentra su significado atraves de la expresión del subconsciente, al nacer salimos calientes al mundo, como un plato recién salido del horno, llenos de energía, sin pre conceptos, el mundo nos enfría. Soñar se vuelve con el tiempo en uno de los mejores aliados para cometer locuras, sinsentidos tanto para perjudicarnos como para entablar la aventura de nuestras vidas, mi causalidad me lleva a pretender encontrar la necesidad de expander la experiencia de la vida, directamente, desde el contacto mas normal con la barrera de los procesos subconscientes, por que somos y tenemos que ser siempre ese cambio constante de circunstancias que nos afectan.
Capaz cuando nos enteramos que estamos en un sueño, nuestra cabeza se libera de cualquier simbolismo y nos muestra directamente el precipicio al que estaría bueno saltar.
